lunes, 1 de marzo de 2010

Mi futuro es "Sagrado"


Mi futuro dejo de ser "Sagrado" hace año y medio aproximadamente, cuando la gran junta directiva y otros miembros patriarcales de la Universidad del Sagrado Corazón, se dieron la tarea de lanzar una investigación fantasma, a través de la su correo electrónico, con el fin de evaluar un proyecto el cual consiste en acortar el semestre de 15 semanas a 13, lo que conlleva la ampliación del horario de clases.

Inicialmente una clase regular con duración de una hora y viente minutos, pasaría a dos horas, las de concentración, por ejemplo, de dos horas a tres y los laboratorios, ni hablar, más de cinco. Ahora, el planteamiento es el siguiente, de la matrícula subgraduada (4415 estudiantes) sólo el 26.25%, es decir 1159 alumnos, contestó dicha investigación, ajorrando como resultado que el 71% (819) favorecieron el cambio, lo que refleja notablemente la manipulación de los números. ¿Cómo es posible tomar vastas decisiones en base a números que representan la minoría estudiantil? ¿Hay respuesta para eso?

Ahí es cuando me doy cuenta de la actitud representativa y repetitiva de Puerto Rico: la política. La mera acción de tomar decisiones sin contar con el consentimiento y aprobación de la masa es política. Esta situación, en comparación a la política es la siguiente, los intereses primordiales de los grandes, los atropellos contra la multitud, entre tantos. La universidad tiene que entender que sus estudiantes no somos un producto para vender, somos el parte de una institución católica, independiente y lo mas importante, sin fines no lucrativos.

Durante una reunión convocada por grupos estudiantiles, el presidente dio una explicación carente de base y fundamentos, más bien fue un cálido saludo presidencial. La decana, no hizo mas que leer un papel el cual no decía nada, al igual que ella, pero aun así lo más indignante fueron las caras y las sonrisas burlonas de nuestra "jefatura". Un papel lo aguanta todo, pero una comunidad molesta, ¡NO!.

Al salir de ahí me fui con la infalible convicción de que nuestro futuro a parte de ser sagrado, ésta escrito. Sin embargo, la comunidad universitaria se dejo sentir, a pesar de las muestras de indiferencias. Confío, que la facultad no se haga de oídos sordos, ni eche en saco roto la voz de los colegiales, cosa que posiblemente pasará, mucho micrófono, mucha algarabía, mucha libertad de expresión para caer en lo mismo: EL CAMBIO ES OFICIAL.

Caballero, ¿pensaste en los estudiantes, en las madres y padres solteros, en los que trabajan durante el día y te estudian en la noche? ¿Y los profesores, en donde los dejaste? ¿Qué me tienes que decir acerca de la reacción de los estudiantes? Le tengo que reiterar la misión de la universidad... "educar a personas en la libertad intelectual y la conciencia moral, dispuestas a participar en la construcción de una sociedad puertorriqueña más auténticamente cristiana: una comunidad solidaria en la justicia y la paz."

Solidaria en la justicia... ¿pero, el cambio va? Como dice el lema: "Tu futuro es Sagrado".

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