sábado, 22 de junio de 2013

Gustos

Me gustaban esos días de luna llena y de miel.
Me gustaban esas noches de besos y abrazos.
Me gustaba el hecho de tener que dormir sentada sobre ti, y tu advertencia.
Me gustaba esa primera excavación de tu lengua en mi boca.
Me gustaba mirarte y mirarme.
Me gustaba tu olor a sudor. Era música,  luces y folclor.
Me gustaba ser tu fiesta después de fiesta. Solo una noche.
Me gustaban muchas cosas. Tú,  un ejemplo.
Me gusta(ba). El "ba" no va.
Aún gusta.

jueves, 20 de junio de 2013

Es

Es más divino escuchar tu sonrisa en la taza del café.
Es placentero imaginarte entre los arbustos de una mañana gris.
Es inexplicable tu punto color carne sobre tu carne. sEso emocionante recordarte entre los atardeceres de los días oscuros.
Es confuso verte en otras caras.
Es admirable admirarte.
Es grato tu música recorriendo la piel.
Es tu forma en los poros del cuerpo.
Es exquisito contemplar tu corazón agitado cerca de mis oídos.
Es inevitable olerte con la llegada del mediodía.
Es. Son. Serás. Eres. Será.

Es el ambiente.

Son muchas cosas. Tu cuerpo, el mio, tus labios, los mios.

Serás eterno en la memoria.

Eres tú.

Será,  algún día,  será. 

Preferencias

No sé si es machismo o ego masculino. Algo es. Ustedes quieren ser hombres pero sin H. Así no se puede, suena igual pero en síntesis es un horror.

Cada vez que algo pasa, para bien o mal, mi alma se eleva y le da con danzar en un sopa de letras. Sopa que unidas hacen una sinfonía que crea poesía. Parecido. Si de preferencia se trata, dejaría mi esencia descansar sobre la atmósfera. Con el fin de mirarte desde el cielo.

No existen mejores formas para escribir, solo dejar el espíritu; volar, los dedos; transcribir, la mente; pensar y los sentimientos; gobernar es más que suficiente. El problema es cuando los sentimientos realmente se creen que gobiernan.

Y gobiernan. 

Ustedes además de llenarnos el alma nos vacían los suspiros. Nos acaban el órgano de bombardeo. Nos cambian las miradas. Nos albotan las prioridades. Nos instan a verlos en nuestro futuro. Nos envían más al allá. Nos endurecen la cara. Nos sacan lágrimas. Nos hacen odiarlos entre besos y caricias prohibidas.

Nos hacen alucinar con prioridades inexistentes. Ustedes, ustedes, siempre ustedes.

Sin capaces de hacer tantas cosas con solo mirar a los ojos, ocultar las verdades, decir sus mentiras, hablar a media verdad, escucharnos sonreír.

Ustedes siempre. Sus poderes son naturalmente de otra galaxia.